jueves, 28 de junio de 2007

Del enamoramiento al amor



La importancia de hablar con los chicos de la sexualidad desafía a padres, maestros y catequistas. El hablar de este tema implica que el que habla muestre ser un testigo de que la fidelidad y la lealtad son posibles. Si vive esos valores, es un referente para esos chicos y, si lo hace respetando los valores que vive cada familia y conociendo la formación que tienen en el tema, será un muy importantemomento para no dejarlo pasar.

Los temas a trabajar tendrán que ver con las nociones claves de la sexualidad humana desde las ciencias humanas y desde la catequesis (en el caso de colegios o parroquias cristianas) apuntando a la necesidad de educar en el amor.

Hay muchas dificultades aún hoy, para llevar a cabo esta tarea pero, viéndolas como desafíos para transmitir un mensaje creíble, es una tarea pendiente de los educadores.

La Educación para el amor en el marco de la educación afectivo sexual y los principios desde los cuales partir para esta tarea

La sexualidad humana tiene que ver con la identidad de la persona ya que no somos un cuerpo con una zona genital sino que somos varones y mujeres y la sexualidad abarca a toda la PERSONA. Todo lo que somos y hacemos es sexuado porque hay una manera de SER humano masculino y una manera de SER humano femenino. Somos mujeres o varones diferentes en todo sentido, física, psíquica, espiritualmente y socialmente. Hasta en el pensamiento y en el sentimiento nos diferenciamos, lo cual no implica que un sexo prevalezca sobre el otro o sea superior o inferior, simplemente y nada menos, somos distintos y complementarios; lo que tiene uno no lo tiene el otro.

La sexualidad humana, por lo tanto, abarca el SER y el HACER de la persona.

Hay una necesidad de ayudar a integrar en las personas concretas, los aspectos biológicos, psicológicos, sociales y espirituales.
Nacemos con un sexo biológico pero nos vamos haciendo varones o mujeres en la medida que vamos integrando a nuestra vida el SER y el HACER masculino o femenino.

Y esto es una tarea personal y comunitaria para llegar a lograr esa identidad sexual que se conquista al final de la adolescencia y se construye mediante identificaciones.De ahí la urgente necesidad de modelos definidos.

Aspectos del amor:

Necesitamos ser educadores para las diferentes formas de amor:

El Filial
El Fraterno
El de Amistad
El de Pareja
Y en la Familia a partir del amor de madre o de padre

Estas son diferentes formas de amor porque conllevan diferentes tipos de expresión, de entrega y de complementariedad.
Para la Educación Afectivo Sexual no hay recetas, hay sí, acompañamiento, especialmente de la familia en primera instancia por ser el primer ámbito de crecimiento y de relación de la persona y luego de los ámbitos educativo/institucionales.

Si tuviéramos que pensar en una ecuación para resolver la Educación Afectivo Sexual, tendríamos que pensarla en términos de donación de tiempo y vida al servicio de los niños y adolescentes.

Porque llegada una etapa, los hijos se preguntan los porqué que están detrás del cómo nacieron; y los porqué se relacionan con la inquietud por saber si fueron queridos, esperados y para qué nacieron. Necesitan información y formación, es decir, una información amorosamente formada que los ayude a descubrirse frutos del amor entre un hombre y una mujer que son su padre y su madre.



Educar para conocer la diferencia entre el enamoramiento y el amor, para llegar a descubrir que el enamoramiento es algo pasivo y pasajero que termina ni bien termina la atracción física mientras que el amor es una tarea permanente de aceptación de la diferencia para llegar a la complementariedad y reciprocidad de un amor maduro.

La Eduación Afectivo Sexual debe ayudar a reconocernos como personas sexuadas y a descubrir y valorar a los demás también como sexuados/as; ayudando a que la sexualidad sea asumida como parte integrante de nuestra vocación a ser personas en comunidad de personas, descubriendo la capacidad de "don de sí".

Y también, ¿por qué no?, volver a educar para la castidad que implica la integridad de las personas en cualquier estado de vida a los que su vocación los llame y decicida a partir de una una opción libre por el motivo que la persona considere valioso.
Muchas políticas sanitarias y también algunas educativas, proponen informar a los niños/as sobre la mejor manera de ejercer la anticoncepción evitar embarazos prematuros, protegerse de las enfermedades de transmisión sexual, de Sida, etc.

Se ofrecen también a las mujeres alternativas anticonceptivas muchas de las cuales conllevan peligro para su salud y se les propone limitar el número de hijos debido a la deficiente situación socioeconómica.



Ante estas propuestas, también podría incluirse algo que lleva más tiempo, más responsabilidad y sobre todo renuncia al facilismo y al placer por el placer mismo, como es, la educación integral, la educación para concebir bien, para llegar a ser mujeres y varones más felices y libres.

La Educación Afectivo sexual es un marco para formar en el amar para el don de sí, para el cuidado de la salud propia y ajena, para el uso responsable de la tierra, para la adquisición de un verdadero desarrollo sustentable; en definitiva educar para la vida en todos sus aspectos

Educar para que las nuevas generaciones puedan contestarse la pregunta ¿ Cuál es el sentido que le quiero dar a mi vida?Que puedan contestarla ... y que sigan teniendo ganas de hacerse la pregunta , porque en última instancia, en esto consiste la apasionante aventura de estar vivo/a.

María Inés Maceratesi

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