lunes, 4 de agosto de 2008

4 de Agosto, Día del Párroco: redescubrir su misión


Hoy se celebra un nuevo Día del Párroco. Nada mejor que dedicarles a modo de regalo el Salmo del Buen Pastor (sal. 123) porque eso es lo que son para todos cuantos se acercan a recibir un consejo, tal vez en busca de un escucha atento que sea capaz de recibir una confesión, una inquietud, un dolor, sin juzgar sin imponer una solución determinada, sin afán de hacer de cada persona un dependiente, sino guiando, acompañando y sosteniendo para que sepa qué es lo mejor para su vida hasta alcanzar la relativa madurez que cada uno va adquiriendo hasta llegar al final de su vida.

Y el párroco, a veces, es el único referente de Cristo que tienen algunas comunidades, especialmente las más alejadas, como aquéllas perdidas en pueblitos muy pequeños en los cuales, hay una única capilla a la cual acudir en busca de alimento espiritual.

Pero, al igual que en cualquier institución, el ansia de poder puede estar presente en algunos sacerdotes párrocos y entonces encontramos una variedad de situaciones en las que el párroco intenta que todo pase por sus manos y, en lugar de delegar responsabilidades para ocuparse más profundamente de lo que concierne a su misión, dedica parte de su tiempo a ocupaciones menores que podrían desempeñar otras personas. Pero, gracias a Dios, no es una situación muy común porque la mayoría de los párrocos tienen y demuestran una especial dedicación por los templos vivientes, los fieles que se le encomendaron.

Aprovechemos este día para profundizar un poco la misión del Párroco apelando a los siguientes recursos que los laicos debemos conocer para ayudarlos más y mejor:

La misión del Párroco en el Código de Derecho Canónico:

En atención a la importancia pastoral de su misión, el Código de derecho canónico dedica dos extensos cánones, los cánones 528 y 529, a dar indicaciones al párroco sobre el cumplimiento de sus funciones.

De acuerdo con ellos:

a) El párroco está obligado a procurar que la palabra de Dios se anuncie en su integridad a quienes viven en la parroquia (canon 528-1)

b) Procurará que la Santísima Eucaristía sea el centro de la vida parroquial (canon 528 - 2)

c) El párroco debe procurar conocer a los fieles que se le encomiendan (canon 529 -1)

d) El párroco procurará promover la función propia de los laicos, y cooperará con el Obispo diocesano (canon 529 - 2)
Las funciones anteriores constituyen obligaciones verdaderas para el párroco, aunque son de difícil concreción. Por eso, además, el Código de derecho canónico da una relación de las obligaciones más concretas del párroco: por ejemplo: la administración de ciertos sacramentos (canon 530, y canon 1108 para el matrimonio)

La misión del Párroco en el Documento de Aparecida:

El Documento de Aparecida esclarece aún más la misión del párroco en el marco de la formación de discípulos misioneros, analizando el quehacer eclesial desde la perspectiva de los más pobres y débiles en la fe. Justamente la misión principal del párroco es el cuidado del rebaño que no consiste únicamente en la administración de los sacramentos, sino en hacer discípulos y misioneros de Cristo.

La Iglesia necesita asumir que todo fiel católico necesita ser atendido personalmente, teniendo en cuenta que "
Un pastor tenía cien ovejas (Mt. 18,12), y al darse cuenta que le falta una, la va a buscar.

Los párrocos tienen la misión y tarea de ayudar a los laicos a establecer y ejercer su apostolado abriéndoles espacios de participación y confiándoles ministerios y responsabilidades en una Iglesia donde todos vivan de manera responsable su compromiso cristiano.
La misión del Párroco se complementa con la misión de los laicos:

A los catequistas, delegados de la Palabra y animadores de comunidades que cumplen una magnífica labor dentro de la Iglesia, les reconocemos y animamos a continuar el compromiso que adquirieron en el bautismo y en la confirmación". (DA 221).

Por ahora la realidad nos muestra que todo sigue dependiendo del clero y que si el párroco dice sí es sí y si dice no, es no. Y así se apagan muchas inspiraciones del Espíritu Santo a las cuales podría darse al menos, la posibilidad de probar a ver qué pasa. Muchas veces los laicos quieren aportar al campo pastoral, del cual se habla muy largamente en los documentos de la Iglesia pero no se encuentra el eco necesario para llevar adelante cualquier iniciativa.

Una corrección fraterna:

Es común comprobar que, si a algún párroco le gusta un método de evangelización, todos tienen que seguirlo o se vuelven en desobedientes y rebeldes. Lo mismo si le gusta una determinada asociación o un determinado movimiento apostólico. Todo depende de él. Y así, con extrema facilidad, los héroes de antes, por un simple cambio de párroco, de un momento a otros se vuelven en villanos y quedan excluidos del círculo de los elegidos.
Así podemos comparar esta forma de "gobernar" una parroquia, pequeña comunidad con la gran comunidad que es un estado gobernado por personas con la mismas características, las mismas que forman parte de la condición humana: ambición de poder, de notoriedad, de ser alabados, indiscutidos, etc.

Para tener en cuenta:

Es necesario rebasar el concepto de parroquia como feudo, encomienda o beneficio, por lo cual todas las entradas de la parroquia le corresponden al párroco, que dispone de ellas como quiere. Al mismo tiempo, hay que aclarar el papel del párroco como pastor, lo que representa un servicio y por lo tanto no da derecho a sentirse dueño ni de los feligreses, que le son confiados, ni de los bienes de la parroquia.

Puesto que toda la Iglesia está en función de la Misión, nunca la Misión se tiene que parar por falta de ministros. Hay que buscarlos a cómo dé lugar. Ahí está el ejemplo de Moisés (Ex 18, 21) y los apóstoles (Hch 6, 1ss). En lugar de atorarse, buscaron colaboradores y siguieron adelante.

Para concluir:
Todos sabemos que, a pesar de las dificultades, los párrocos son irreemplazables en el ejercicio de su misión pero, quizá en ciertos casos, se debería cambiar el estilo de gestión para llegar a lo que expresa el salmo 23 . También es importante reconocer que desde el Papa para abajo, a todos nos iguala el Bautismo y nos diferencia la misión; tenemos que apoyarnos, amarnos y conocernos mutuamente porque nadie ama al que no conoce.
¡Feliz día del Párroco!

María Inés Maceratesi

1 comentario:

Anónimo dijo...

HOLA, MARIA INES!

UN GUSTO CONOCERTE A TRAVES DE TU HERMOSO BLOG "REDESCUBRIR"
LEI TU ARTICULO DEL DIA DEL PARROCO,

EN MENCION A TUS RECONOCIMIENTOS, QUIERO HACERTE LLEGAR
DEL P. EDUARDO MARTINEZ ABAD, UN VIDEO QUE PREPARAMOS
PARA EL DIA DE LA ASUNCION DE MARIA, BASADO EN POEMA DEL PADRE
COMO PREMIO A TU FÉRREA LABOR AL SERVICIO DEL SEÑOR.

MI NOMBRE ES STELLA CORBO, SOY EX ALUMNA DE M. AUXILIADORA Y ME FORME
EN EL ESPIRITU SALESIANO JUNTO AL PADRE CARLOS MORENA ALLA POR LOS ´80.
TE QUISE HACER LLEGAR UNA ATENCION DEL ACTUAL PARROCO DE CALASANZ.
BENDICIONES!

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http://www.youtube.com/stelcor
http://santuariodelavida.blogspot.com/