Uno de cada 750 bebés cuyas madres consumen alcohol durante el embarazo padece Síndrome Alcohólico Fetal
Uno de cada 750 bebés cuyas madres consumen alcohol durante el embarazo padece Síndrome Alcohólico Fetal (SAF), caracterizado por un peso y talla menor, cabeza de menor tamaño y anomalías de la cara, según informaron en un comunicado fuentes del Ayuntamiento de Valencia.
La causa de este síndrome estriba en que el alcohol que consume la madre atraviesa con facilidad la placenta y cuando llega a éste, permanece allí más tiempo actuando, ya que tiene mayor dificultad para eliminarlo.
Como consecuencia, los bebés pueden sufrir este síndrome, cuyo cuadro clínico se caracteriza por un peso y talla menor, cabeza de menor tamaño y anomalías de la cara: aperturas oculares pequeñas, puente nasal bajo, nariz corta, labio superior delgado, mandíbula subdesarrollada, surco naso labial inexistente o perfil mediofacial plano.
También puede presentar alteraciones orgánicas, dificultades para dormir y problemas de succión durante la infancia, mala coordinación motora, retraso del desarrollo y problemas de aprendizaje, mala memoria, mala comprensión del lenguaje y poca habilidad para resolver problemas e, incluso, hiperactividad.
En total, se calcula que nace un bebe con Síndrome Alcohólico Fetal por cada 750 embarazos que se producen, y éste se puede evitar en el 100 por ciento de los casos si la mujer no bebe durante el embarazo, manifestó la concejal de Sanidad y Consumo en el Ayuntamiento de Valencia, Lourdes Bernal.
Además, hay un nuevo elemento que "refuerza la necesidad" de abstenerse de beber alcohol durante el embarazo, puntualizó Bernal, quien hizo referencia a que los responsables de la Organización Mundial de la Salud (OMS) en materia de drogodependencias tildan de "necesario" evitar que las mujeres consuman alcohol durante las primeras semanas de su embarazo ya que "existen suficientes evidencias de que este consumo predispone a que el niño también abuse de esta sustancia cuando sea mayor", puntualizó.
Europa PressLunes, 21 de abril 2008
Fuente: Consumer Eroski
Comentario Editorial:
Esta noticia nos llega de Valencia pero, como en tantas otras temáticas, bien puede aplicarse a nuestro país, en el que las mujeres jóvenes y aún las adolescentes, abusan del alcohol como nunca se ha visto.
El otro día iba caminando por la Av. Rivadavia y vi venir una chica con un cigarrillo encendido en una mano y una botella de un litro de cerveza en la otra; botella que iba vaciando a medida que caminaba.
Me preguntaba cuál es hoy la necesidad de consumir alcohol aún yendo sola por la calle. Después me di cuenta que era sábado y comenzaba a anochecer, quizá eso formaba parte del "preboliche" que hoy día está tan popularizado - consumir bastante alcohol antes de la hora de ir a bailar - como una moda que lo único que hace es predisponer el organismo para recibir más y más alcohol y animar conductas arriesgadas.
En el caso de las mujeres esto es bastante grave y por lo visto no tiene visos de parar y, como en tantas otras adicciones, una parte la tiene que aportar la persona afectada, otra la familia y otra el estado que debería regular qué, cómo y quiénes son los consumidores, y legislar en consecuencia controlando a quienes venden bebidas alcohólicas indiscriminadamente.
El panorama que nos pinta el artículo de Valencia es bastante sombrío; y nuevamente me remite a citar la película "Idiocracy", comentada en un post de este blog(1) en la cual se ven las consecuencias para el futuro de las presentes actitudes de muchos de los jóvenes hoy.
(1)Ver Etiquetas: Editoriales y Comentarios sobre la realidad
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